Son los mejores, en todo, eso no hay duda. Pero nadie es perfecto y Mercedes también sufrió problemas durante la primera semana. Fue con el apartado del motor, a pesar de haber sido el que más vueltas ha dado.
Durante el segundo día de pruebas, se conocía que Mercedes daba por finalizada la jornada cuando Valtteri Bottas estaba al volante del W11 en la tarde. Algunos pensaros que iban tan sobrados que habían dado por cerrada la jornada, pero nada lejos de la realidad.
Se supo que el motor Mercedes sufrió un daño terminal, algo que no se imaginaban cuando detectaron el fallo. La unidad estaba rota y tuvo que ser reemplazada. Andy Cowell, responsable de motores, admitió el trabajo que está habiendo en Brixworth y en las mejores que se están introduciendo en el ERS y en el motor de combustión interna.
“Así que mucho trabajo para construir la especificación correcta, conseguir que funcione a largo plazo, y luego proporcionar unidades de potencia a los equipos para que puedan encender sus coches”, añadía en Barcelona.
No se quedó ahí porque en el coche de Nicholas Latifi también tuvieron problemas cuando el viernes en la mañana, se paró en la recta de meta. También se procedió a reemplazar el motor. Al fin y al cabo, todos lo han sufrido, Ferrari y Honda igual. Normal con tantos kilómetros en apenas tres días.
Mercedes hizo un total de 1.187 vueltas con su motor entre los tres equipos que lo usan. No muy lejos se quedó el Ferrari con 1.092 vueltas. Honda ha tenido el mejor inicio desde su regreso con 855 vueltas completadas, datos que esperaban gracias al avance en su fiabilidad durante 2019 y que han seguido manteniendo durante el invierno. El peor, el Renault, que por poco ha superado las 800 vueltas.
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