Un total de cuatro pilotos sufrieron pinchazos en sus neumáticos. Primero Valtteri Bottas, que luego le hizo abandonar el Gran Premio. Llegaron los dos Williams y Lando Norris se dio cuenta de un problema similar justo antes de llegar a la calle de boxes. De ahí que perdiera tanto tiempo.
Los pianos fueron uno de los principales quebraderos de cabeza de los pilotos en Losail. Un circuito hecho para el motociclismo que tuvo que instalar bordillos según las instrucciones de la FIA. Los monoplazas, al pasar por encima de ellos, perdían piezas de fibras de carbono, dos chasis se vieron dañados y el alerón de Pierre Gasly quedó en trocitos.
Mercedes ha investigado un poco sobre los pinchazos y demás incidentes con los bordillos y creen que se debe a que los bordillos eran demasiado blandos para estos monoplazas. “Es extraño, porque el problema es que, al ser tan suaves, los coches pueden pasar por encima de ellos. Cuando esto sucede, los alerones delanteros están muy cerca del suelo y les afecta”, comenta Andrew Shovlin según publica Motorsport.com.
“Además, los neumáticos reciben un fuerte impacto, así que, de alguna forma, si los pianos fueran más agresivos, sería más sencillo para los monoplazas”, explicaba. Los alemanes sufrieron un gran mazazo porque había opciones de llegar al podio con Bottas, pero ese pinchazo les deja con una ventaja de cinco puntos frente a Red Bull en el Mundial.
Michael Masi defendió las órdenes de la FIA a Losail diciendo que estos pianos son parecidos a los de Austria. “Son los pianos estándar de la FIA/FIM que han estado en Spielberg desde siempre. Creo que es uno de los elementos que usan los pilotos para ir más rápido”. Ahora queda esperar a la investigación de Pirelli, que de nuevo está en entredicho por comprometer la seguridad de los pilotos.
