Parece que cada año los equipos de Fórmula 1 tienen menos tiempo para probar sus coches antes de que comience una nueva temporada. Este 2024, la FIA vuelve a reducir el tiempo de estas pruebas de pretemporada. Todas las sesiones durarán 15 minutos menos, tanto las matutinas como las vespertinas. El resultado general es de media hora menos por día y una hora y media menos respecto al año pasado.
Además, para los test privados que pueden realizar los equipos durante la temporada regular con coches de hace tres años, la FIA se pone dura, según el artículo 10.9 e) III) del Reglamento Deportivo. En estas pruebas solo podrán utilizarse componentes que ya hayan implantado en algún Gran Premio o que acumulen kilometraje en otras pruebas de la misma temporada.
La FIA también tendrá el derecho a aumentar los test “para la investigación sobre la reducción de pulverización en tiempo húmedo”. Es decir, para desarrollar un componente con lo que mejorar la visibilidad de los pilotos en condiciones de lluvia.
Pero para este 2024, no solo cambian algunas normas de cara a los test, también lo hacen en otros apartados. En cuanto a los motores y los cambios de componentes también hay modificaciones en el reglamento. Los cambios permitidos se reducen, algo que pondrá en jaque la fiabilidad de las unidades de potencia. Sólo se podrán utilizar tres motores de combustión, MGU-H, MGU-K y turbocompresores en lugar de cuatro como la temporada pasada.
Por último, inscribirse para el Mundial les saldrá más caro a los equipos. Cada constructor tendrá que pagar 603.000 euros para participar en la competición. Pero, además, los puntos conseguidos en el campeonato anterior conllevan un gasto extra. 6.000 euros por cada punto sumado. Red Bull será el equipo que más se tendrá que rascar el bolsillo, abonando 6,2 millones de euros para participar en la temporada 2024 de Fórmula 1.
