El año para Charles Leclerc no comenzó de la mejor manera. Tanto él como el equipo anunciaron que se contagió de COVID-19 al estar con una persona que dio positivo. Se quedó aislado en su casa de Mónaco, pero como se ha visto en Fiorano, Leclerc está en perfecto estado.
Ferrari afirma que justo a las 9:30, Leclerc dejaba el box para comenzar sus primeras vueltas de instalación. Era su regreso a un monoplaza de Fórmula 1 tras el Gran Premio de Abu Dabi, del cual han pasado 44 días.
Durante el programa, Leclerc ha superado las 100 vueltas. Se han centrado en acostumbrare al coche de nuevo, los procedimientos de salida y ya pensando en la nueva temporada, así como en los test de pretemporada que se disputarán en marzo, aún no se sabe si en Baréin o el Circuit de Barcelona-Catalunya.
Al final del día, el propio Charles Leclerc comentaba sus sensaciones al estar de vuelta: “Regresar al coche fue grandioso, genial. Ver a mis mecánicos de nuevo, ponerme el mono de carrera, hacer mi rutina de calentamiento, ponerme el casco y finalmente saltar al coche y presionar el botón de arranque… el sonido de un motor de Ferrari siempre es mágico”.
Con más de 100 vueltas en el bolsillo, el monegasco está más que contento por el día y le desea lo mejor a su compañero en su día de pruebas: “El día fue simplemente perfecto e hicimos todo el trabajo que habíamos planeado hacer. He disfrutado mucho. Ahora le paso la palabra a Carlos y le deseo mucha suerte para mañana”.
El siguiente en la lista es Carlos Sainz, que también ha estado presente en los entrenamientos que ha realizado su compañero. Después vendrá el turno del piloto de Haas F1, Mick Schumacher y, para acabar, Callum Ilott será el encargado de cerrar la jornada.
